lunes, 19 de marzo de 2007

Detrás de la genialidad del guitarrista Jeff Beck

A Jeff Beck poco le ha importado la admiración de la masa y la cultura de la música. Si fuera así se “boletiaría” a grabar con un reconocido artista actual como lo hizo Slash en estos días para ganar más fanáticos -además de la ganancia económica que esto representa-, o sacaría discos cada año como lo hace Eric Clapton. Este veterano músico inglés (nació en 1944 en Surrey) publica un álbum cada vez que le da la gana, muchos dicen que cuando deja su afición a los automóviles clásicos.


Su particular sensibilidad con las cuerdas de la guitarra eléctrica y su inusual forma de tocar distintos ritmos desde mediados de los sesenta le ha merecido el respeto por sus colegas al que tienen como referencia a la hora de su creatividad (ellos dicen sencillamente que "toca diferente"). Claro que dos temas de él son suficientes para adorarlo de por vida y rescatar su labor con la guitarra acústica: Greensleeves, canción instrumental ¡de menos de dos minutos de duración!!! y Love is Green, en el que realiza un soberbio overdub con una guitarra acústica y una guitarra eléctrica, demuestran su talento en esta faceta poco explorada, al punto que un amigo melómano, gran aficionado de su música (“gran” es poquito, casi una mentira para describirlo), manifiesta que “Jeff Beck deja pendiente al mundo del rock un álbum completamente acústico” (¡por solamente esos dos temas!!!).


El resto de material grabado (no lo conozco todo pero de lo que he escuchado) es eléctrico, y es muy complicado encasillar su género musical porque se ha caracterizado en tocar gran diversidad de estilos, luego de terminar sus estudios en la Escuela de Arte Wimbledon de Londres: Se puede decir que desde que formo parte de la banda The Yardbirds, en la que estaba Jimmy Page, empezó con sicodelía bluesera, luego hizo blues rock con Ron Stewart a finales de los sesenta, paso cinco años después a algo muy extraño que denominaron Jazz-fusión, y poco a poco, esporádicamente, fue incorporando sonidos electrónicos al punto que desde hace unos años experimenta con el techno y propone algo completamente nuevo en la música contemporánea.


A Jeff Beck se le atribuye junto a Jimi Hendrix (esta el dilema de quien fue primero) el espléndido y al mismo tiempo complicado -a quien lo ejecuta- el control del sonido del feedback o retroalimentador de la guitarra eléctrica. Una obra suya como Blow By Blow de 1975 no puede pasar desapercibida por su fineza secuencia artística y es suficiente para conocer su enorme capacidad recursiva con la guitarra eléctrica, de igual forma destaco Wired de 1976 y There and Back de 1980, aunque hay otras personas que admiran lo que hace hoy día.


Las tapas de sus discos lo delatan, lo único que quiere mostrarle al oyente es su música, lo que hace con ese instrumento y no caer en el espectáculo comercial. Quizá por ello su nombre pasa desapercibido en la actualidad, a tal punto que lo confundieron con otro músico llamado Beck. En este punto Jeff Beck no pudo tolerar eso y nombro su siguiente disco "Who else!" (y quién más puede ser!) en 1999 y, supongo, al del 2003 "Jeff" ya resignado.

1 comentario:

TIC`s - Universidad Central dijo...

Bien. ¡Qué bueno sería incluir un fragmento en formato MP3!